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viernes, 26 de junio de 2009

Monjas

Ya está liada, ya andan todos los blogs de vigilancia católica arremetiendo contra Teresa Forcades. Se veía venir y lo único que extraña es que la reacción reaccione tan tarde. Es el poder de los medios. Sor Teresa había escrito en Foc Nou en el número de mayo pasado. El artículo se podía consultar por internet incluso. Su posición era, a mi juicio, clara: un prochoice en toda regla aliñado con un poco de compasión estéril y de plausible antimachismo. Un aliño complementario que no logra disimular la sustancia de una postura diametralmente opuesta a la moral del magisterio de la Iglesia. Sin embargo, ni pena ni gloria, porque para una mayoría de público lector de Foc Nou basta a veces que algo sea antimagisterio para que resulte loable y para el resto lo único que nos merecía era un "no meneallo" y que se ocupe de la monja quien tiene sobre ella responsabilidad (a menos que se entienda que los superiores religiosos sólo están para firmar las cuentas). Luego la cosa se vio en TV y, claro, ha saltado el escándalo. Y ya están algunos clamando al obispo, al metropolitano y al Papa de Roma, y los comentaristas pidiendo secularización, excomunión y disciplina de azotes. Personalmente creo que no va a pasarle nada, que aquí paz y después gloria, porque en esta Iglesia tan represora y tan esclavizante todos hacemos lo que nos da la gana. Incluso, como Forcades, un ejercicio de irresponsabilidad para quien viste un hábito sagrado.
Monjas, huy, huy. Las he conocido de (casi, claro) todas clases. Activas, contemplativas, místicas, pasotas, temerarias, ingenuas, letradas, listas, benedictinas, salesianas, cistercienses, esclavas del sagradocorazón delapasión dejesússacramentado, josefinas, clarisas, dominicas, hospitalarias, mínimas, jerónimas, escolapias y etc. y etc. Son un mundo: cada congregación, cada monasterio, cada comunidad, cada monja, cada palabra y cada silencio. Las hay firmes y las hay rebotadas. Las hay con una vocación como la copa de pino y otras que están allí porque tienen que estar en alguna parte.
Prudentes e insensatas. Pero incluso las feministas, las que propugnan alcanzar un status jerárquico en la Iglesia, las que pugnan por la ordenación femenina, por ejemplo, deberían saber que la sensatez es el camino del éxito y que la medida del coraje no es la del escándalo que puedan provocar. Mal camino éste.
Forcades tiene sus seguidores/as. Se entusiasman con ella. No niego que pueda decir algo interesante y fructífero. Pero a mí se me han quitado las ganas de oírla. Prefiero oír a esta otra, que no era menos feminista, ni menos madura, tal vez sí menos brillante y mediática, menos titulada y menos "teóloga" (ja), pero desde luego tenía más sentido común y especialmente más sentido de la propia vocación:


15 comentarios:

Jordi Morrós Ribera dijo...

Siento decir que no tengo tan claro el pronunciamiento tan claro de la opción "pro choice" de Teresa Forcades. A no ser que hagamos equivalente no condenar a la mujer que aborta (esto último sí lo que deja bien claro Teresa Forcades) con la opción "pro choice". La etiquetas son fáciles de colgar y difíciles de quitar.

Y lo segundo es que las comparaciones son siempre odiosas. Comparar a una teóloga más o menos contestaria y mediática con una mística como Cristina Kauffmann es ciertamente difícil. Cada una juega un papel muy distinto en la amplia, rica y diversa Iglesia del Señor.

Yo comprendo que ciertos sectores de la caverna se indignen con lo que dice Teresa Forcades. Al igual que la gente de la cuerda progresista respire reconfortada al oir su discurso.

El problema de fondo no son los discursos de Teresa Forcades (al fin y al cabo discursos de un bautizado más), sino que esta reacción de los vigilantes de la ortodoxia nos hace evidente y manifiesto los sufrimientos que aún quedan por venir y por manifestarse. Y sin duda eso es lo que hay y lo que habrá en los próximos años cuando ya nadie se acuerde ni de nosotros ni de Teresa Forcades.

Jordi Morrós Ribera dijo...

Para complementar lo anterior os propongo la lectura de un artículo aparecido en "El Pais" de Juan Masiá, otra bestia negra para los vigilantes católicos de la ortodoxia.

http://www.elpais.com/articulo/opinion/Proponer/imponer/cuestionar/condenar/elpepuopi/20090626elpepiopi_12/Tes

¿Son tan distintas las formas de pensar de Juan Masiá y de Teresa Forcades, y son ambos unos desaforados promotores del "pro choice"?

Cada cual que se quede con su opinión, y com dicen en inglés "is up to you", pero que al menos sea una opinión ni visceral ni inquisitorial, sino desde una actitud de escucha respetuosa de aquellos que piensan y argumentan de forma distinta.

Outsider friar dijo...

Jordi, en este caso tengo que estar en profundo desacuerdo con usted, aunque se me considere un cavernícola visceral e inquisitorial. "A causa de l’íntima vinculació de la mare al fill mentre aquest no és viable fora d’ella, la decisió d’avortar és indissociable de l’autodeterminació de la mare, de la seva llibertat personal. Aquesta vinculació única entre dues vides fa que no es pugui salvar el fill en contra de la voluntat de la mare sense violar la llibertat personal de la mare." (Foc Nou) Esto es prochoice, guste o no, es la afirmación de que, salvo que el feto haya llegado a eso que denominan viabilidad o que existan presiones externas, la decisión, la opción, la elección sobre la supervivencia del feto corresponde legítimamente a la madre.
Pero esto no es lo peor a mi modo de ver. Lo peor es meter a Dios a justificar lo injustificable.
Traduzco directamente de la entrevista (la de camineo.info es algo defectuosa): "Usted puede sobrevivir o morir sin que otra persona viva o muera. Esta particularidad de la madre con el feto hace que podamos entender que DIOS HA PUESTO EN MANOS DE LA MADRE LA SUPERVIVENCIA DEL FETO MIENTRAS ESTE NO SEA VIABLE. Este es el respeto desde un punto de vista teológico y católico." Esta es una mala teología, venga de una doctora o venga de una catedrática, me da igual. Afirmar que Dios confía indiferentemente a la madre la decisión sobre que el feto se desarrolle o sea destruido deliberadamente es una teología perversa, es desconocer al Dios de Jesucristo, al Dios que ama la vida y no hizo la muerte. Dios encomienda esa vida dependiente a la madre para que la lleve adelante, la proteja, la cuide. Eso a veces ocurre y a veces desgraciadamente no. Podrá darse una decisión equivocada, susceptible de una responsabilidad moral o penal con atenuantes o eximentes que dependan de circunstancias externas o personales, pero en ningún caso metamos a Dios a justificar la interrupción de una vida. Eso no es católico. Y además es grave.

Jordi Morrós Ribera dijo...

Pues yo sinceramente creo que ahí hay un problema de distintos niveles.

La primera afirmación sobre la vinculación entre la madre y el feto yo la entiendo desde un punto de vista de ordenamiento jurídico. Es muy difícil en los ordenamientos jurídicos de hoy en día establecer algún tipo de castigo a la madre por no querer o no poder llevar adelante un embarazo.

En los que ya estoy más de acuerdo es en que hay que ir con mucho cuidado con mezclar la referencia divina sobre si llevar adelante o no un embarazo, y ahí seguramente habría que aclarar y matizar las opiniones de sor Teresa.

Pero ese el precio que debemos pagar todos cuando un tema como la regulación del aborto se convierte en un "embroglio" donde se mezclan perspectivas jurídicas, médicas y de conciencia.

Y después de haber dicho esto también proclamo que estoy plenamente convencido que de aquí a no muchos años las generaciones venideras nos mirarán quizás como unos descerebrados por el poco respeto a la vida que hay en nuestra cultura de sociedades supuestamente bienestantes, pero poco sensibilizadas para una mirada respetuosa hacia el misterio de la vida. Pero este problema yo entiendo que no se arregla ni con leyes ni con códigos penales.

Anónimo dijo...

Blogger, usted es de una bonachonería serafica. Lo que esta señora ha escupido sólo merece desprecio y no perder el tiempo, y digo señora porque me niego a considerarla monja, aunque haya hecho la profesion (por lo visto sin estabilidad benedictina ninguna) o aunque lleve un habito ridículo (cofia y pantaloncitos) propio de una carroza del dia del Orgullo gay.

Guerrera de la LUZ dijo...

Buenos días padre.

Qué soplo de aire fresco escuchar a Cristina Kaufmann, qué sonrisa más deliciosa y qué mirada más limpia. Una verdadera gozada escuchar su enseñanza sencilla, profunda y preciosa, muchas gracias.

Respecto a Teresa Forcades, me da mucha pena, subió un post José Luís de Valero traduciendo el famoso vídeo y tanto escucharla, como verla, te deja ese mal cuerpo y ese mal sabor de boca que se queda cuando acabas de tragar un alimento en mal estado, un alimento podrido.


Lo más aberrante para mi como madre fué ver cómo hablaba de la "relación feto-madre" (una relación que no existe)

Aparte de lo ridículamente progre y feminazi que es, se nota que jamás ha vivido un embarazo y no sabe que una madre jamás lleva un feto en su interior ni se relaciona con su feto a lo largo del embarazo: una madre, desde el momento en el que sabe que está embarazada, tiene dentro a su hijo y se relaciona con su hijo.

Ojalá se quitara el hábito, pero no caerá esa breva.

Lo más deseable sería que le llegara un buen torrente de Espíritu Santo y se fuera a hacer penitencia por ahí.

alfonso sanz dijo...

Estoy con Jordi en que este problema de la falta de respeto por la vida no se arregla con códigos penales. Pienso que se arregla con educación (no laica, sino educación a secas) y con cultura. Lo que pasa es que las leyes forman parte de la cultura. Kant decía: "dadme una banda de ladrones y yo con leyes haré de ellos un grupo de santos". Eso no funciona así, pero influye. Es necesario poner líneas para que se vea el dibujo. Y las lineas delimitan, ponen límites. Abrazos a todos, incluso a la tal monja.

Jordi Morrós Ribera dijo...

Monja abortista (esto en algún blog de Religión Digital), progre, feminazi, disfrazada del día del orgullo gay. No está mal la cosecha.

Para los que quieran dedicar sus energías a otras actividades más creativas que la búsqueda y adjudicación de adjetivos, les recomiendo este artículo de Teresa Forcades.

http://www.iglesiaviva.org/222/222-12-FORCADES.pdf

Claro que una monja que cita a Lovelock, Marcuse, Anselm Grün (y de paso nos lo considera influenciado por el New Age,no está mal) Simone de Beauvoir, Carol Gilligan, y al final una persona que no conocía llamada Luis Antonio Tagle obispo de Filipinas (y la cita del cual es de lo más precioso del artículo) puede dejar descolocado a más de uno, y no digamos si encima tiene una visión prejuiciosa de lo que debe ser una señora monja.

Pues nada poned en una balanza las dos cosas, los adjetivos y el artículo, y que cada cual se quede con lo que más le plazca.

decepcionada dijo...

Outsider,gracias por incluir en su post este video.me tranquilizasaber que todavía quedan monjas como Dios manda,no como la Forcades&comany que de monjas tienen lo que yo,o sea la toca(yo tambien llevo por mi trabajo¿sabe?)jordi morrós,tu como siempre para variar,sí pero no,bueno pero malo,blanco pero negro,etc.dices siempre mucho pero no dices nada¿porque no reconoces que la forcades,es de tu cuerda? por lo menos ten la caballerosidad de defender a tus amigas,supongo que queda claro que para nada estoy de acuerdo con la Forcades,y además su comportamiento,ideas y afán de protagonismo me parecen una incoherncia dado el camino que ella libremente eligió.

Jordi Morrós Ribera dijo...

Para "decepcionada".

Hoy festividad de los apóstoles San Pedro y San Pablo procuraré meditar sobre quienes son los de mi cuerda y sobre mi supuesta falta de caballerosidad.

Y respecto a la defensa de Teresa Forcades sólo decir que creo que ella sola se basta y se sobra para defenderse y yo no soy nadie para estos menesteres.

Jordi Morrós Ribera dijo...

Y por cierto y como dicen en inglés "last but not least", os recomiendo vivamente el DVD que sobre Cristina Kaufmann elaboró el equipo de Francesc Grané, y del cual "Outsider" nos ha ofrecido un pequeño aperitivo.

Quizás no había dicho nada hasta el momento porque conozco personalmente a Francesc Grané, y al menos para esas cosas tengo un cierto pudor, pero los auténticos místicos en nuestra sociedad quizás también son una especie casi en extinción y eso pasa por encima de cualquier pudor.

Aquí encontraréis toda la información sobre el DVD:

http://www.eulogosmedia.com/castellano/eu_marcos_kaufmann.htm

Hasta la próxima.

Sarpullido dijo...

Me he consumido todo el video. ¿Como puede alguien tener ideas tan claras y prudentes sobre la salud y el negocio de las farmaceuticas y decantarse tan ingenuamente por este oscuro negocio del aborto?

decepcionada dijo...

Jejeje,jordi,sabia que te picaría,si es que despues de todo sois unos pardillos,se te ha visto el plumero colega(lo de colega es por la edad,que tenemos la misma)y eso de que puede defenderse ella solita,pues que lo haga pero no delante de nosotros sino de Dios,porque está faltando a sus votos,lo que pasa es que la gente está tan decepcionada que ni la escucha y los que la escuchamos,porque nos interesan estos temas,pues no estamos de acuerdo con ella,no por el tema en sí,en que cada uno puede tener sus propias ideas al respacto,sino porque su comportamiento dista mucho dde lo que debería ser como monja y de clausura nada menos,aunque debo decir que conozco a una ex-monja de clausura que piensa igualito que la forcades,a saber lo que les enseñan en ese convento¿donde está el obispo ?que se necesita

Anónimo dijo...

A este paso, pronto nadie podrá decir nada que no esté dentro de la ortodoxia más ortodoxa.
La Hna. Forcades és una gran monja, una buena teóloga que opina con libertad (y no como otros) y una gran persona.
Y a ella le debe dar igual todos los adjetivos que se le cuelgan.
Esos mismos adjetivos yo se los podría colgar a todos ustedes, retrógrados cavernarios!

Anónimo dijo...

Hallo.
Ich mochte mit Ihrer Website outsiderfriar.blogspot.com Links tauschen